No tengan miedo
Lecturas: 1ra: Ef 1:11-14; Sal: 33; Ev: Lk 12:1-7
Esta breve reflexión fue escrita por el Reverendo Padre Njoku Canice Chukwuemeka, C.S.Sp. Es un sacerdote católico y un miembro de la Congregación de los Padres y Hermanos del Espíritu Santo (Espirítanos). Está trabajando con el Grupo Espirítano de Puerto Rico y República Dominicana. Es el administrador de la Parroquia La Resurrección del Señor, Canóvanas y el Canciller de la Diócesis de Fajardo-Humacao, Puerto Rico. Para más detalles y comentarios se puede contactarlo en: canice_c_njoku@yahoo.com, cancilleriadfh@gmail.com, canicechukwuemeka@gmail.com.
Hoy es el viernes de la vigésima semana del tiempo ordinario. El mensaje de Lucas hoy suena como un mensaje del fin del tiempo.
Lucas parece indicar que la tensión y la oposición a Cristo se están haciendo más fuertes a medida que las autoridades buscan medios para atraparlo.
Así que, cualquiera persona que siga a Cristo necesita estar enfocado y listo para cualquier cosa. Sabiendo esto, Cristo nos exhorta: “No tengan miedo, porque todo lo que ahora está cubierto será descubierto”.
Esto incluye los planes de los malvados que siempre amenazan a los justos. Basta señalar que Cristo sabe que el miedo y la amenaza de muerte pueden paralizar a uno.
Como el Señor de los vivos y de los muertos, Cristo sabe que la muerte física no es el fin. En cambio, es una transición a la eternidad.
Por lo tanto, nos exhorta: ” No teman a aquellos que matan el cuerpo y después ya no pueden hacer nada más. Les voy a decir a quién han de temer: Teman a aquel que, después de darles muerte, los puede arrojar al lugar de castigo”.
Nuestra esperanza está en estas palabras reconfortantes y tranquilizadoras de Cristo, “cada pelo en tu cabeza ha sido contado. ¡Por lo tanto, no hay necesidad de tener miedo!
Indican que el Señor está de nuestro lado. Está listo y es capaz de liberarnos tanto de las consecuencias como de los efectos del pecado y de todas las amenazas que enfrentamos en nuestra vida diaria.
El mensaje de hoy es, no temas. Cada pajarito es cuidado por Dios. Hasta los pelos de nuestras cabezas están contados. En la vida, las pruebas y los momentos difíciles son inevitables. Todos necesitamos el salto de fe que espera la vida eterna.
Por último, todo lo que tenemos que hacer para merecer la protección que Cristo nos prometió hoy es estar de su lado confiando en él.
Esto requiere ser justos e inocentes en nuestros caminos y acciones. Significa ser verdaderos cristianos. Por supuesto, también significa someterse enteramente a Cristo.
La paz sea con ustedes.
¡Maranatha!